domingo, 4 de mayo de 2014

Cuento que transcurre en un hotel de Benidorm

Era el momento sagrado de mi vacio pero el sol dirigia su ojo majestad hacia los centros de mi animo. Tenia no mas de treinta en edad en aquel hotel de benidorn,una mujer,dos hijos,una familia en un mundo comprado.Cuando todo eso cambio en aquel hotel de benidorm estaba solo con mi instinto y descubri que la soledad era mi vocación...al menos de vacaciones de rodriguez en aquel hotel de benidorm cambio mi vida o eso pensaba, pero el cambio que no desistía era yo. Y por la noche me asalto la prudencia pero todo ya estaba en paz.

Esperar aquello que no llega fumando frente al frega platos y encontrarme. Tomar de todo ello algo precioso como de cualquier experiencia de esteta. Muchas veces he maldecido mi gran inteligencia y elevada sensibilidad que me aislaba pero en aquel hotel de Benidorm sintiendo los pechos de una mujer de veinte en edad y noventa de pecho no me siento solo ni al acordar no contarlo a nadie y era perfecto de inventar para un cuatentonado en cronos temporal que no por biológica ya que mis anchas espaldas y mi melena oscura engominada para aparentar el dinero que nunca tuve hicieron que en aquel hotel de Benidorm aquella tímida partinaire de trabajo de ojos de gacela se había convertido en mi amante por una noche y tuve entonces la sensación de no volver a estar nunca mas solo cuando ella aseguraba que no podríamos volver a estar juntos nunca ni siquiera en un mundo que hubiera sido bendecido por el amor.

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